Ir al contenido principal

Gypsy Rose - Prey (Simmons Records, 1990)


Esta semana, tras una conversación en twitter al respecto, pensé en algunos vinilos de mi colección que raramente escucho. Los busqué. Entre ellos (pocos) escogí este para traerlo al blog vinilero por excelencia y contar su historia, o, vaya, cómo acabó en mi discoteca particular y porqué no lo escucho (casi) nunca.

Michael Ross, cantante y compositor, tenía una banda de hard rock melódico en Toronto (Canadá) en 1988 llamada Secret Affair. Gene Simmons (sí, el lengua-larga) se fijó en ellos y les ofreció un contrato. Hasta ahí, todo correcto, una historia del montón. ¿Qué pasó después? La banda Ross la compartía con los guitarristas Bryan Joyce y Craig Van Gaver, el bajista Rob Laidlaw y el batera Randy Cooke. El bueno de Simmons se encargó de despedir a la pareja rítmica y sustituirlos por gente de su confianza: Michael Vaughn se encargó del bajo y Steve Thomas de la batería. Además, metió a guitarristas de sesión en el proceso. No contento, les cambió el nombre, convirtiéndoles en Gypsy Rose. Les metió en sus estudios de Nueva York a los mandos de Tom Treumuth y Gary Furniss (con su "producción ejecutiva") y obligó a rehacer
el repertorio de la banda: de las diez canciones del grupo, seis se gestaron en el estudio y las firmaron los productores junto al vocalista. Tan solo se salvaron cuatro. Y, curiosamente, las mejores: Love me or leave me, Shiver then shake, Wild reaction y la balada (moña) Don't turn back on me now. ¿A qué nos lleva esto? Que Gene firmó una banda pelele con un cantante que le gustaba y fabricó un producto "vendible".

¿Por qué acabó Prey en mi viniloteca? En los últimos ochenta yo era un fan fatal del hard rock de la época y descubrí a Kiss. Gene se pasó dos años de entrevistas diciendo la gran banda que estaba produciendo, la banda definitiva. Así que, sin esperar más, en cuanto vi el disco en un estante me lo llevé a casa, creyendo que estaba ante los nuevos Motley Crüe o Bon Jovi de la época. Gene fake me. 

¿Es malo Prey? No. Tampoco podría recomendarlo. Tiene todos los tópicos típicos del hard rock de radiofórmula pero sin chispa. La producción demasiado homogénea, la voz sin garra, las guitarras ronronean, vaya, un cinco ramplón. Creo que algunas canciones, como el single Poisoned by love, el riff y el estribillo de Love me or leave me o un tema bastante redondo como Wild reaction, se salvan. 

La edición que traigo está impresa en Alemania y corresponde a la edición europea de época. Dudo que haya habido re-ediciones, pero lo desconozco. No trae encarte ni nada, sin créditos ni letras. Una cutrez de edición, vaya. 

Os dejo unas canciones para que juzguéis por vosotros mismos. El vinilo es una rareza y está en perfecto estado, por si a alguien le interesa.

Buen finde, vinileros.

Gypsy Rose - Poisoned by love


Gypsy Rose - Highway-one-way


Gypsy Rose - Wild reaction







Comentarios

  1. Si hubieses escogido a Silent Rage, EZO o House of Lords -también aventuras de Simmons Records- hubieses asegurado mejor el tiro. Ni idea de estos, oye. Voy a escucharlos ipso facto.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo creo que fue el último tiro de Gene, no lo sé, pero en vez de hacerlos famosos los hundió. Igual es que le he cogido "gato" al "demon" (broma Kissmaníaca) pero incluso con los grupos buenos se quedó a medias. House of Lords y EZO podrían haber sido más grandes. Y con Doro se lió. Pero seguro que ganó mucho dinero. Estos Gypsy Rose, en fin, dales una escucha y me cuentas.

      Eliminar
  2. Vaya, esto se ha convertido en un escaparate de venta de vinilos y no me había enterado? Tranquilos que yo tengo nos cuantos infumables por ahí que empezaré a entrarlos, a ver si algún friki me los compra, que "hay gente pa tó". De estos ni idea, pero vaya, se ha de reconocer que Simmons sabe vender muy bien sus productos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ja, ja, no creo que este sea un buen sitio para deshacerse de vinilos raros o poco deseables. Me hizo gracia. Creo que todos tenemos discos o cedés que compramos en su momento, a veces con una buena razón, y que ahora los miramos y pensamos ¿en qué estaría pensando? Hay alguno que no me acuerdo muy bien cuándo lo compré... Espero tus deshechos. Un abrazo.

      Eliminar
  3. Cierto Rockologia, tengo un puñado de vinilos que no creo que vuelva a escuchar ni se como llegaron a mi colección. Lo malo es que no me inspiran lo suficiente como para dedicarles unas lineas pero tampoco me desprendería de ellos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Somos tan raros que ni de las cosas que no nos gustan y no recordamos por qué las adquirimos nos queremos desprender. El embrujo de la música.

      Eliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Triumph - Just a game (RCA, 1979)

  Mi adoración por este trío canadiense es relativamente reciente. De hecho, la adquisición de sus vinilos ha ido a la par con la evolución de este blog. Y hoy me apetecía compartir y reivindicar este tercer largo para completar el magnífico repaso que el compañero de barrio KingPiltrafilla ya ha hecho anteriormente. En mi opinión, Triumph atravesó tres etapas: la primera, la inicial, como casi todas las bandas, buscando el éxito, que consiguieron a partir de este Just a game (alcanzaron el platino en su país natal y el disco de oro en Estados Unidos) y certificaron con el siguiente Progression of power (1980); encadenaron varios excelentes discos hasta cerrar su segunda etapa con Thunder seven (1984); los últimos discos les llevaron a una deriva más AOR aún, y a la pérdida progresiva de ventas y fama que acabó con la formación tras Surveillance (1987). Escuchar estas tres obras seguidas es un manual de evolución del hard rock en los ochenta, por cierto. Hoy comparto Just a game ,

Loquillo y Trogloditas - Mientras Respiremos (Hispavox, 1993)

  Revisando los discos de los que he hablado en este blog me he dado cuenta de que aún no he reseñado ninguno de mi artista español favorito. Así que esta entrada va a servir para saldar esta deuda con una de las grandes leyendas en la historia del rock en España, y uno de los grupos que más alegrías musicales me ha dado a lo largo de mi vida: Loquillo y Trogloditas. Con una carrera de más de 40 años, puede que se antoje difícil la elección de un solo disco. En este mismo blog ya tenéis algunas reseñas de otros discos de Loquillo, pero, paradójicamente, tenía muy claro a qué disco dedicar mi primera entrada sobre “Loquillo y Trogloditas”. Al que considero el disco más importante de su carrera: “Mientras respiremos”. Es también probablemente mi disco favorito. Es difícil elegir entre su abundante discografía, tanto con Trogloditas, como en solitario, pero cada vez que hago mentalmente una lista de mis discos favoritos de Loquillo, éste nunca baja del pódium. Si, puedo afirmar sin mied

Ciclonautas - Bienvenidos los muertos (2015, El Dromedario Records)

Hoy hacemos hueco en nuestro blog del vinilo al power trío formado por el argentino Mariano “Mai” Medina ( Calaña ), Javiertxo Pintor ( Ja Ta Já ) y Alén Ayerdi ( Marea ). O lo que es lo mismo, Ciclonautas . Este grupo navarro debutó en el 2014 con un doble LP titulado ¿Qué tal? , con muy buenas críticas, y en el 2016 se marcaron este Bienvenidos los muertos . ¿Sabéis de esos días que termináis refugiándoos en la sección de música de un gran centro comercial mientras vuestros acompañantes están a otra cosa? En este caso, llevé a ver la peli de Barbie a mis chicas y mi cuñada y me fui a hacer otros encargos. Luego resulta que no calculé bien el tiempo a la hora de ir a recogerlas y llegué demasiado pronto. Entonces biengasté mi tiempo y mi dinero curioseando entre los estantes de los vinilos, pues encontré de oferta este que os traigo: ni me he molestado en quitarle la etiqueta de descuento que podéis ver en la foto. Lógicamente, había escuchado el grupo, pues me lo puse alguna vez e

Carlos Santana - "Europa" (CBS, 1976)

Es imposible no identificar esta canción con solo escuchar las cinco primeras notas. A pesar de ser instrumental es tan conocida que cualquiera con un mínimo de cultura musical podría “ cantar ” y reconocer las notas iniciales ( tan-tan-na-na-na-nanananá-tanananá…. ). Y cualquiera con un mínimo de sensibilidad también notará cómo se le eriza el vello. Es una melodía que llega al alma, triste y melancólica, una guitarra que habla y llora, que nos cuenta una historia y, sin necesidad de palabras, solo con las notas de la guitarra es fácil de entender. Pero veamos qué hay detrás de ella. Vamos a desnudarla y a comprenderla.

UFO - Strangers in the night (Chrysalis, 1979)

Si tuviera que elegir un único álbum de  UFO  sin duda pincharía este. Tiene  todo lo que una gran banda de hard and heavy debe poseer : fuerza, técnica, estilo, buenas composiciones, una interpretación soberbia y buen sonido. La característica combinación de melodía, ritmo y fuerza te empapa en cada canción y cada miembro tiene su momento de gloria: las líneas de bajo de  Pete Way , la distintiva guitarra de Michael Schenker, la especial voz de  Phil Mogg , el característico feeling del batería  Andy Parker  y la brillante aportación melódica de  Paul Raymond  en los teclados y como segundo guitarrista. Cualquier banda grande tiene un gran álbum en directo, y UFO no podía ser menos, uno doble, como Thin Lizzy (Live and dangerous), Kiss (Alive!), Deep Purple (Made in Japan) o Queen (Live Killers). Durante aquella gira presentado  Obsession  tocaron en pabellones ante miles de personas (15000 en Chicago, la ciudad más "UFOrica"), bien solos o acompañados de bandas de éxito